Una pregunta simple, rara vez lleva asociada una respuesta simple y si, además, tiene que ser políticamente correcta, obtenemos una “respuesta en seco”, es decir, muy cuidada, bien protegida, pero sin aclarar del todo, así que vamos a mojarnos.
Que no quieres compromisos …
Que no tienes planificado tu futuro …
Que no tienes pareja …
Que puede que en dos años cambies de ciudad …
Podría hacer una lista bastante más larga, pero un gran saco lleno de excusas pesa lo mismo que un sobre con una. Si no quieres, no quieres.
Ahora bien, si tu pregunta ¿Compro o alquilo? va en serio, hay que ceñirse a los datos y contemplar los posibles escenarios, me explico. Si tienes un mínimo de ahorros disponibles, aproximadamente el 25% del valor de la vivienda, COMPRA. Si no dispones de la cantidad necesaria, ALQUILA. No te queda otro remedio.
Si compras y por cualquier circunstancia tienes que cambiar de vivienda, de ciudad o de país, puedes hacer dos cosas con tu propiedad, vender o alquilar. En el caso de optar por vender, recuperarás tus ahorros y si decides alquilar, con el ingreso procedente de ese alquiler podrás pagar la hipoteca (aproximadamente el 75% de un alquiler) y conservar la propiedad.
Por otra parte, ten en cuenta que cada día que vives en tu propiedad, no tienes que pagar alquiler. Por supuesto, sí pagarás los gastos corrientes de la vivienda, la cuota de la comunidad, el seguro y el IBI, pero eso será aproximadamente el 15% de un alquiler.
En resumen, si tu opción es COMPRO, tus pagos mensuales por vivienda (hipoteca + gastos), son ligeramente inferiores a los de un alquiler, eso sí, realmente no es un gasto, es una inversión, ya que la propiedad es tuya. Sí la elección es ALQUILO, pagas algo más mensualmente, pero eso es un gasto, porque la propiedad nunca será tuya.
Veamos un ejemplo con números aproximados: